Las preparaciones clásicas de café como la Aeropress, el filtro manual y la French Press se caracterizan por su simplicidad y versatilidad. La Aeropress permite una preparación rápida y aromática, en la que el café se filtra mediante un aumento de presión, lo que resulta en un sabor intenso. El filtro manual permite un control preciso sobre el tiempo de infusión y la temperatura del agua, lo que permite personalizar el disfrute del café.
La French Press, en cambio, utiliza la extracción completa, mezclando café molido con agua caliente y luego presionándolo a través de un filtro de metal, lo que resulta en un café con cuerpo y fuerte. Estos métodos tradicionales tienen su propio encanto y ofrecen una experiencia auténtica de café que muchos amantes del café saben apreciar.